Del lugar de trabajo y los segundos matrimonios

A cuento de que el diz que Marqués se tiraba a su secretaria (¿o era a una secretaria?) hace algunos años, he recordado varios casos de secretarias que naturalmente ya no trabajan que contrajeron segundas nauseas con sus jefes.

Conozco varios casos, naturalmente no porque yo trate ni frecuente mucho al gremio Mary Ward, salvo como subordinadas, sino porque si trato y frecuento a algunos directores generales y consejeros delegados, y claro, he tenido la oportunidad de ver como su secretaria acababa siendo su mujer, su mujer acababa siendo su ex y como le colaban un tercer hijito, cuando la mayor de sus hijos estaba terminando la carrera. Los hombres es que son así. Se creen todo.

Les dice la secretaria "que bien conduces" y oye, se casan con ella, y por supuesto, la quitan de trabajar. La primera no dejó nunca de trabajar, entre otras cosas porque ya era socia de Uría o medico internista en la Princesa, pero la otra naturalmente dejó de trabajar, porque sólo había empezado a hacerlo para poder acceder por la vía laboral lo que por la vía natural nunca hubiera podido conseguir. Pillar.

Vamos, que te vas a poder frotar tu con un consejero delegado salvo que seas su secretaria. No por que los consejeros delegados sean una raza aparte, pero la probabilidad de que salgan del Mary Ward es remota.

El siguiente paso previo a dejar de trabajar es decir que quieren hacer "otra cosa".

Otra cosa suelen ser las siguientes cosas:

"Eventos, protocolo, marketing".   A las secretarias que quieren dejar de serlo nunca se les ocurre matricularse en Derecho.  Bueno, conozco a una que si y hoy es abogado.  Nunca se lió con su jefe. Y su jefe tenía un puestazo.

"Decoración". Ya sabemos que la redención por el arte en su primer y mas sencillo grado es la afición por la decoración del que tuvo la nevera en el salón en la generación anterior y no conserva fotografías de sus bisabuelos casándose de blanco. No, no todos se casaban de negro.

"La moda"  Me interesa mucho la moda, incluso profesionalmente, dicen ellas. (claro, como que tu abuela era costurera, no me digas mas)

Toda vez que la secretaria es difícilmente recolocable en Marketing, y no puede seguir trabajando para su jefe porque se van a casar con el y no se le encuentra ubicación acorde al nivel de satisfacción  y exigencia de su jefe/novio,  se termina finalmente  por negociar hábilmente que la despidan y manden al paro para que estudie Decoración de Interiores que es lo que verdaderamente siempre le ha gustado y  la casa nueva de Pozuelo la ha decorado ella enteramente.  Es mas, está pensando dedicarse profesionalmente a elegir cortinas  o incluso a la moda.

Así que se divorcia de la primera, la secretaria se va a vivir con el en la casa nueva que decora ella misma, se queda embarazada, se casa con su jefe y naturalmente jamás de los jamases vuelve a pronunciar la palabra "Marketing".

Parece mentira que esto mismo, que les pasa a los consejeros delegados, que tienen pasta para mas divorcios y segundos matrimonios, les pase también a los segundones que se creen jóvenes y elásticos y a los que les pone tirarse a las subordinadas.

Me cuesta mucho pensar como un hombre, pero me parece fascinante que todo el mundo sea consciente del ridículo que hacen y ellos, a medirse la meada, como si tuvieran diez años.

PD: Las dos secretarias que tuve, que si eran marquesas de verdad, jamás se hubieran liado con un jefe.  Vamos, ni jartas a gin tonix. Y siguen trabajando, ambas dos.