C.W. me escribe para contarme que ha conocido al Profeta del Fin del Mundo. Lo ha conocido en un vuelo largo, y se han apretado nada menos que cinco wiskis, o como se escriba, mientras C.W. que es de natural conversador y polemista, fue desmontando uno a uno los argumentos del Iluminada.
Por lo visto, el tal Profeta, a pesar de volar en business, no cobra porque por lo visto si pone en Facebook "Felipe necesito dinero", Felipe le manda, por que por lo visto el predijo que la novia del Príncipe vendría de México. Reconozcan conmigo que es lo mejor que hemos oído desde hace años. Y pensar que yo me quedé en la Bruja Lola.
Es curioso esto de las creencias. Las Marmotas, por ejemplo, se creen cualquier referencia salarial extraída del WFA y cualquier rumor de regularización de papeles. Es increíble lo candoroso que puede llegar a ser el público.
Otros por ejemplo, se creen que lo de Zapatero es porque Sonsoles le ha dicho que la Moncloa se le hace bola. Incluso algunos creen que Bono siempre fue rico, e incluso algunos creen que Paloma Segrelles nació bien relacionada, la Preysler elegante o Letizia fina. A base de repetir, te acabas creyendo lo que te digan y lo que es mas, lo acabas asumiendo como propio.
Ando con el refuerzo intermitente a cuestas y trato de averiguar en que momento las motivaciones se convierten en intrínsecas. De momento, parece que en la infancia se funciona con chantaje (o palo zanahoria) en la edad adulta con bonus no motivante, y en algún momento digo yo que la gente aprende a hacer las cosas buenas porque son buenas en si, o a no hacer las malas simplemente porque son malas, o a trabajar porque hay que trabajar, y además nos pagan.
Quizás las motivaciones no son intrínsecas nunca y la mayor parte de la gente sólo funciona si le refuerzan, osea, si puede conseguir algo.
Tengo un poco de lío con este asunto, y me gustaría saber algo mas de psicología evolutiva, o la que sea, para averiguar este asunto. Sobre todo teniendo en cuenta que soy de la opinión de que los motivos intrínsecos de la mayor parte de la gente son la mar de primitivos.
Por lo visto, el tal Profeta, a pesar de volar en business, no cobra porque por lo visto si pone en Facebook "Felipe necesito dinero", Felipe le manda, por que por lo visto el predijo que la novia del Príncipe vendría de México. Reconozcan conmigo que es lo mejor que hemos oído desde hace años. Y pensar que yo me quedé en la Bruja Lola.
Es curioso esto de las creencias. Las Marmotas, por ejemplo, se creen cualquier referencia salarial extraída del WFA y cualquier rumor de regularización de papeles. Es increíble lo candoroso que puede llegar a ser el público.
Otros por ejemplo, se creen que lo de Zapatero es porque Sonsoles le ha dicho que la Moncloa se le hace bola. Incluso algunos creen que Bono siempre fue rico, e incluso algunos creen que Paloma Segrelles nació bien relacionada, la Preysler elegante o Letizia fina. A base de repetir, te acabas creyendo lo que te digan y lo que es mas, lo acabas asumiendo como propio.
Ando con el refuerzo intermitente a cuestas y trato de averiguar en que momento las motivaciones se convierten en intrínsecas. De momento, parece que en la infancia se funciona con chantaje (o palo zanahoria) en la edad adulta con bonus no motivante, y en algún momento digo yo que la gente aprende a hacer las cosas buenas porque son buenas en si, o a no hacer las malas simplemente porque son malas, o a trabajar porque hay que trabajar, y además nos pagan.
Quizás las motivaciones no son intrínsecas nunca y la mayor parte de la gente sólo funciona si le refuerzan, osea, si puede conseguir algo.
Tengo un poco de lío con este asunto, y me gustaría saber algo mas de psicología evolutiva, o la que sea, para averiguar este asunto. Sobre todo teniendo en cuenta que soy de la opinión de que los motivos intrínsecos de la mayor parte de la gente son la mar de primitivos.
