martes, 13 de abril de 2010

Refranes

Por ahí por el principio del blog, el año pasado, hicimos una entrada dedicada a los refranes.

 Claro, entonces no teníamos contador y no teníamos seguidores, y son entradas poco visitadas y nada comentadas.
 Esa, y la del nombre del libro, (se supone que queremos recopilar las entradas en un libro de pasta blanda que se venda en Vips y en los aeropuertos y forrrarnos, este era el primer objetivo del blog: salir de la pobreza por la vía imaginativa), son entradas sin casi comentarios. Y (yo no tengo abuela, ya saben que a partir de determinada edad tener abuelos vivos es de pésimo gusto y denota que tus padres se casaron demasiado jovenes -como Letizia-) eran entradas bastante apañadas.

Podría ser tramposa y volverlas a publicar, ahora que somos 37 registrados. (A punto de Alsa, oiga)

Así que voy a buscar mi libro de refranes, que está en el cuarto de la marmota, porque se lo presté, a ver si se culturizaba, y voy hacer una entrada nueva.

Cuanto mas lo pienso, mas convencida estoy

A ver si vuelve C.W, que para eso es psicóloga además de su otra carrera y sus dos masters, y corrobora mi teoría.
He estado revisando hoy un test de inteligencia que contemplaba las famosas "facetas" mas corrientes (no se contempla ni la social, ni la relacional, ni saber poner la mesa, ni la elección de corbatas y gemelos), estaban mis queridas numérica, espacial, lógica y verbal.

De la numérica he pasado de largo, directa a la verbal, para buscar comprobar mi "preconcepto"....

¡ja!  eso no es un test de inteligencia, es un test de conocimientos.
¡ja!

Test de inteligencia verbal sería que sin conocer las palabras supieras buscar antónimos, pero si los sabes, no es que seas listo, es que las recuerdas (memoria) tienes interés, o te gusta. O que de verdad hicieras análisis sintáctico sin conocer los casos, así por pura ciencia infusa.

Me he ido a la numérica. No es que recuerde mucho yo, pero  se supone que las puedes resolver si te han enseñado. Me juego el cuello que al Teoría de la Relatividad llegó el otro sabiendo hacer integrales. Las integrales no le salen a nadie solo si no se las han enseñado.


Osea, que si seguimos al Sr. Perea (me mondo, que ahora le ha dado por la educación) o a los amantes de la Logse, deberíamos llegar solitos, sin aprender, a resolver integrales, porque nos sale del alma y sin que nos hayan enseñado.

Y los ingenieros hacen puentes sin que les hayan enseñado a calcular.

Estoy empezando a pensar que lo que pasa es que les da palo llamarles "examen de conocimientos", que sería un nombre mucho mas justo..

Voy a ver si tengo tiempo y me busco unos cuantos mas, para ver si me corroboro a mi misma. Por cierto, si la respuesta es "lo que se mide es el tiempo en tardar en resolverlo" la contestación es, entonces, se puede entrenar... y entrenar es, ni mas  ni menos, utilizar la voluntad para mejorar el rendimiento.
Naturalmente que no puedo pretender que mi hijo sea muy listo y muy rápido, eso no depende ni de mi ni de el, pero lo que si me parece que depende es enseñarle a entrenar. Yo hice ciencias hasta COU con gran esfuerzo, y saqué un 7.4 en selectividad. Es el último número que recuerdo, pero desde luego, si no hubiera empollado como una posesa, jamás hubiera aprobado Matemáticas. Así que quieren que les diga, el test no mide lo lista que soy, sino lo buena (o mala) estudiante que fui.

La inercia (de la mala leche)

A pesar de que llevo un día y medio siendo optimista y decididamente convencida a ser positiva, la inercia de la mala  leche ante tanta estulticia me puede todavía. Durante este periodo he aprendido a ser austera (que no era), y mala leche con austeridad sale monja. Y eso, claro, no soy.
Yo creo que el camino al optimismo, en mi caso, debe pasar por la frialdad. Y también es difícil, porque me cuesta ser fría (pero ya lo soy, eh) cuando me dan (o no me dan) feedback de las entrevistas y nuevamente pienso, "no era para mi, o como diría mi madre "no estaría de Dios".
Yo soy bastante providencialista, pero optimista en este me cuesta ser. Eso si, cuando veo alguna por ahí que es una ceniza convencida, sin derecho real a estar deprimida,  me pongo de mal humor.

Por ejemplo:

¿ustedes no conocen a ninguna de esas cuyos hijos siempre están en urgencias, aunque sea con una legaña?
¿esos que cuando empiezan las vacaciones ya están quejándose de que se acaban?
¿esos que cuando les dices que estás embarazada te enumeran las terribles consecuencias de embarazo, parto y posterior niño?
¿alguna de esas que se queja por lo que no ha pasado, y se angustia por todo lo que le pueda, aunque sea remotamente salpicar en forma de responsabilidad?

Realmente, y parafraseando a C.W, yo soy de infarto, porque yo dejo fluir mi mala leche, en forma de blog, y, circunstancialmente, me encuentro negativa (pero me estoy quitando) ante las perspectivas laborales que me rodean. Pero no ando jodiendo a los demás, eso, seguro.
Ya hay una entrada por el principio dedicada a la depresión como excusa.

PD: Kiva.org. Lo he mirado ¿son microcréditos? No sé si tengo capacidad para escribir sobre eso, voy a mirarlo bien, pero no estoy segura de ser capaz.
PPD: Proyecto Funerario de la Economista & Co. Yo no sé hacer un business plan, pero a lo mejor cuando haga el IESE me entero. Apuesto por el Mortibus y traslado de cenizas a Galicia, siempre y cuando las amigas de Tikitina no se enteren y la den por perdida.

Eso si, me han dicho que es un tema muy mafioso (lo de las funerarias). Tal vez tengamos dificultades de entrar.

Pablo de Lora

Me tragué ayer varias de las ponencias de Pablo de Lora, avisada por una amiga profe de la Complu. La Complu hace mucho que dejo de ser la u...