miércoles, 17 de noviembre de 2010

Low Cost

Echo mucho de menos a C.W.

 Primero, porque por la diferencia horaria no podemos chatear, y segundo, porque mucha de la inspiración de las entradas procede de lo que ella veía en los ascensores de su edificio.  Hoy me he acordado mucho de ella porque he ido a un cursillo donde todas tenían el pelo frito (que  manía) llevaban pichis, cazadoras guateadas y maletines de lo que en mi pueblo llamarían "material" vs piel, claro.  Hay determinadas profesiones donde el pelo frito se lleva mas que en otras, y, el Recurso Humano, como la contabilidad o la auditoría son algunas de ellas.

Osea, un cursillo donde sólo había Tamaras, y C.W. en la otra punta y yo sin poder compartirlo.
La verdad es que a mi me cuesta mucho deshacerme del looksism a la hora de juzgar, sé que no debo, sé que es un prejuicio, y debe ser hasta pecado. Lo sé todo, pero me sale. Eso sí,  lo reconozco según apunta. En cuanto veo el rizo pequeño convenientemente trabajado con espuma y se me despierta el prejuicio, lo identifico.
Es cierto que la crisis afecta incluso al que no la padece y de repente todo el mundo, incluida la Infanta Elena compra en Mercadona y se precia de ello (al finy al cabo es la Teoría de la Decisión Racional aplicada a la compra de paquete de leche) y que se organizan excursiones a Primark, que tiene la manía de situarse en centros comerciales fuera de la M-40, pero sigo pensando que por poco dinero que se gane o se tenga, no es necesario freírse el pelo o enfundarse un pichi.
Además, tenemos a los chinos, que ya se han metido de lleno en el asunto textil y tienen cosas muy apañadas.

Pablo de Lora

Me tragué ayer varias de las ponencias de Pablo de Lora, avisada por una amiga profe de la Complu. La Complu hace mucho que dejo de ser la u...