Cuando yo trabajaba en el Sitio Elegante podíamos tener una reunión formada por dos condes y un marqués, dos de ellos con grandeza de España y no pasaba nada. A nadie le parecía extraño. Lo normal.
Pero en el Departamento Equivocado este donde estoy ahora resulta que hay uno cuyo abuelo tiene una calle en Madrid y están todos entre fascinados y nerviositos.
¿has visto? me dicen ." Su abuelo era el de la calle." "ten cuidado al llamar, que su abuelo tiene una calle"
Pero si yo trabajé con Santiago Bernábeu, por Dios, que eso no es una calle, es un campo de fútbol...que me vas a contar a mi de calles y plazas.
El lunes me llevo el Elenco, y la guía esa de calles que tenían antes los taxistas, y lo pongo todo encima de la mesa.
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