Me presento, soy C. W. Carrington, de los Carrington de toda la vida, con dos Carreras (Universitarias) y también venida a menos, como mi amiga EconomistaDescubierta.
Después de años de observación de otras mujeres hemos elaborado una serie de Teorías Económicas que queremos compartir. Como resumen de los temas que trataré en paralelo a mi amiga y que desarrollaré en sucesivas entradas:
Teoría del Ahorro
Dejar de trabajar porque se gana lo mismo que “la chica”. Se despide a “la chica”, con lo que se ahorra su sueldo. La chica continúa trabajando, por azar del destino.
Teoría de la Inversión
- Pagar a una hija la carrera en una Universidad de prestigio, para "pescar" novio rico que la sustente. El padre se ahorra las futuras inversiones en la hija, aunque tiene que hacer una primera inversión sustanciosa.
- Invertir en silicona, pedicura, manicura y peluquería para lo idem.
Como comprenderéis estas teorías se basan en gran parte en mis observaciones sesgadas por la ENVIDIA. ¿Por qué no fui educada de esta manera? ¿Por qué se me empujó a estudiar para ser más lista y no simplemente para pescar marido? ¿Por qué ahora tengo además de trabajar 12 horas que limpiar mi casa y hacer la compra? ¿Por qué se me juzga por mi físico maltrecho en vez de por mi sagacidad?
To be continued …
2 comentarios:
Teoría de la inversión. Al referirse C.W. Carrington a universidades de prestigio te refieres, además, a carreras de las llamadas "con muchas salidas". Es decir, económicas, empresariales, etc... estas son las vías de acceso a los hipotéticos novios que permitirán que dejes de trabajar para dedicarte a estudiar Arte que es lo que realmente te gustaba. Se ahorraría uno mucho estudiando Arte directamente, pero claro, lo mismo tenías que pagar algo tu.
Mujer, a mí me gustan que sean inteligentes, que luchen por lo que valen, y no por pillar un maridito, pero también que sean mujeres, y no hablo de mujeres que tengan físicos maltrechos, simplemente que sean mujeres. Porque hay algunas que tienen la feminidad olvidada en algún sitio. Y qué quieres que te diga, afortunadamente mujeres y hombres somos distintos en ciertas cosas.
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